Leí una noticia que me pareció muy esperanzadora, de esas que ya casi nunca salen en los periódicos. Resulta que unos investigadores del Reino Unido descubrieron una encima llamada LOX que es la causante de que el cancer haga metástasis en distintas partes del cuerpo, razón por la cual se esparce y se vuelve terriblemente agresivo, además de incurable. Ellos lograron bloquear la acción de la encima con químicos y así evitar que se esparciera en el cuerpo de ratones con cancer de mama, lo cual da la esperanza de que esto mismo sea aplicable a los seres humanos. (http://news.bbc.co.uk/2/hi/health/7813072.stm)

La noticia me trae a la mente algo que vi hace poco en un episodio de Nip/Tuck (que por cierto sigue siendo mi serie favorita). En el programa, una mujer busca a los cirujanos plásticos para que le quiten los dos senos y se los cambien por prótesis. Ella no tiene cancer, sólo está completamente asustada por que su madre y hermana han muerto de cancer de mama y ello la tiene petrificada del miedo. Ella misma dice en una de las escenas que cada mañana se examina en la regadera esperando encontrar algo anormal en su cuerpo y que ello sea el cancer que, irónicamente, está esperando, y esa psicosis no la deja vivir.

Yo sé que ésta es una enfermedad que, además de desconocida y aparentemente más compleja que los alcances humanos en la ciencia, es el mal que aqueja al mundo desde hace ya muchos años y que se presenta con cada vez mayor frecuencia. Ahora bien, por un lado, creo que casi todos somos conscientes de que es, hasta cierto punto, culpa nuestra y de nuestra cultura. La proliferación de comidas tratadas con hormonas, el ambiente dañino que respiramos a cada momento, la interminable lista de productos artificiales que nos untamos o metemos al cuerpo, inclusive los materiales con que se construyen nuestras casas, cuya radiación es algo con lo que no contábamos… todo es claramente el detonante de muchas de las manifestaciones de la enfermedad.

La pregunta que me surge ahora es, ¿y si además nuestra propia psicología está cooperando para que desarrollemos este tipo de enfermedades? Es decir, si vivimos en un estado de psicosis permanente, donde somos bombardeados por los males que nos acarrearán las cosas que usamos, y constantemente somos advertidos de todo lo que deberíamos evitar, ¿no estamos acaso formando un círculo vicioso donde, por un lado producimos los químicos y hormonas que dan lugar a la detonación del cancer, y por otro queremos dejar de usarlos y nos llenamos de terror con la tele, los peiódicos, etc.?

Las corrientes psicopedagógicas de hace unos años afirman que, si un individuo es expuesto a cierto estímulo de manera constante, si se le repite algo de modo permanente, su psique, al igual que su cuerpo, terminarán por aceptar aquello de lo que se le está convenciendo. ¿No es acaso lo que nos estamos haciendo a nosotros respecto de las enfermedades? Guiados por el horror al envejecimiento (mira quién habla…), la salud como algo preponderante al grado de excedernos… Tal vez la calma, la tranquilidad, las cosas simples como un momento padre con los que quieres o contigo mismo, la risa, la música, un fin de semana en el campo, y todas esas cosas que tenemos en el olvido por que “no tenemos tiempo”, sean la ayuda que nos hce falta para sentirnos mejor, para olvidarnos de la psicosis y salir del círculo vicioso en que nuestra propia cultura nos ha metido y no hemos hecho nada para darnos cuenta y salir de él.

No sé, no soy médico, ni psicólogo, ni crítico social, pero a lo mejor lo que nos falta es disfrutar más y preocuparnos menos, aún y sobre todo, en tiempos de crisis. Enjoy!