
Lo cotidiano, eso con lo que nos las vemos envueltos todos los días, en todo momento y lugar, es algo que de hecho, no se cuestiona y, más allá, no llama nuestra atención en ningún momento pues nos es familiar, nos es conocido y cómodo, forma parte de nuestras vidas de una manera tan íntima, que nuestra vida diaria no tendria sentido sin todo ello.
Lo cotidiano es la motivación por la que nuestra vida se desenvuelve a cada instante pues, si el mundo que hemos creado nos fuera siempre novedoso, llamativo o inexplicable, entonces estaríamos etérnamente paralisados en la contemplación constante de todo lo que nos rodea. Precisamente esta idea es la que da lugar a la exposición temporal que en estos días se presenta en el munal.

La exposición presenta una enorme gama de piezas de muy variadas épocas, es decir, del siglo XVIII a nuestros días. Todas las piezas dialogan entre sí para recrear un discurso cuya idea central es la de admirar lo cirtcundante. El espectador se encuentra de repente absorto en la contemplación de cosas cotidianas, mismas acerca de las cuales, tal vez, nunca había relfexionado, y esta es una muy buena oportunidad.

Cintas de colores en el piso te hacen ver al suelo mientras entras a las salas de la exposición que presenta una bola de disco aplastada, empotrada en un bastidor, un árbol del que cuelgan serpientes, una alfombra con el patrón de la naturaleza, una lavadora gigante, una ventana artificial muy real… intercaladas están las piezas más antiguas, provenientes de siglos pasados donde lo cotidiano era exactamente lo mismo que es hoy para nosotros. Retratos, esculturas, lienzos… Video, instalación… El personaje central en esta exposición no es sino el espectador en su relación con el mundo diario, con la vida, su vida!


Enjoy!
PD: El munal es el museo que está en el Centro, el que tiene un caballo afuera, por que lo crean o no, hay quien no considera estas cosas como algo cotidiano.
http://www.munal.com.mx/index.html